Tus rojos labios perfuman el aura
en las luminosas mañanas del mes de mayo,
sus esencias navegan en las alas del tiempo
hasta las profundidades del eterno espacio.
Por tus colorados aromas fluyen mis días
como el agua cristalina río abajo,
siempre la misma y siempre distinta,
pero nunca retorna atrás la que ya ha pasado.
Tus redondos colores encienden el viento
con los rojos aromas que exhalan tus labios
y tu hiriente mirada se aleja al infinito
entre verdes esmeraldas y azules topacios.
El agua de la clepsidra no cesa su caída
mientras mis amores van muriendo muy despacio,
tus rojos labios perfuman el aura
en las efímeras mañanas del mes de mayo.
En las alas del viento