Si vienes a casa encontrarás dos flores…
Una de ellas, te esperará en la puerta
Aún no sé qué flor será a ciencia cierta
Pero le elegiré pensando en tus colores
Pondré un poco de perfume en la mesa
Con el agua destilada de mis días serenos
Y en la mesa estará una vela, por lo menos
Para tu sonrisa, ahuyentando mi tristeza…
Si vienes a casa, abriré bien las ventanas
Para que huyan las infamias acumuladas
En esas noches tan sórdidas y heladas
Que la soledad te deja bajo las sábanas
Pondré viandas en mi mesa con esmero
De halagar tu paladar y también tu vida
Cantaré en tu oreja, tonadilla conocida
O pondré a sonar tu música sin peros…
Si vienes a casa encontrarás dos flores
No sé aún cuales serán, a cierta ciencia
Pero una de ellas celebrará tu presencia
y me dará pretexto para contar amores
La otra, será por si amaras lo que hallas
Y te esperará ahí, saliendo de la alcoba
Por si todo lo vivido el corazón te roba
Y tomándola en tu mano, ya no te vayas