Soy un hombre en un camino, andando
luz fresca de la mañana
ando libre, sin cargas, buscando
magnéticas y húmedas tormentas.
Se multiplican exponencialmente
en mi cabeza caen rodando
bellos recitares, finas líneas, cantos
palabras y versos que alivian mi llanto.
Sigo firme en mis pasos
frente a un delirante mundo que arraso
contemplo la mañana, su empuje
me lleva hasta tus brazos.
Miro el monte en su fuerza y su calma
horas lentas y luminosas van pasando
respiro y cierro los ojos en mi hondura
parece que ahora te estoy besando.
Qué clara me viene la mañana
los pensamientos trabajan temprano!
Qué alegría cielos azules, extensos
venirme matinal, aquí a tu lado!