Tú;
bramar amenazador,
ulular único, brotando desde la nada.
Son tus olas llegando entre rocas a mí playa.
Burlándose de la orilla, convirtiéndose en espuma,
volando con el viento, para así, burbujeante saludarme.
Eres desde mi infancia, compañero de aventuras;
descubriste para mí, la vida que dentro llevas;
sabiéndome brindar de tu fauna el alimento.
O embravecido, revolcarme con orgullo;
cuando sobre ti, alardeando estaba.
Amigo, de amores confidente.
Caída libre; zambullida.
¡Nuevamente en ti!
José .-