¡Ay, amor!
las veces en silencio te ame
con toda el alma,
bajo la tibia luz de Luna.
Y mis sueños navegaban
en el sereno mar de tus ojos.
¡Ay!, amor,
cuántas noches bajo las estrellas
y a través del del viento,
suspiraba.. te llamaba,
te dije, sin ti no respiro, no vivo,
muero por escuchar tu voz
que grita en mi, como un lamento,
que me estás doliendo
hasta en el pensamiento
y eso, amor..
bien lo sabe el cielo y tu,
porque a través de el,
vivo de tu aliento.
¡Ay!, corazón,
no te vuelvo a enamorar,
no le lloro más
a la dulce sensación
que nos hiere por dentro,
¡Dejemos de soñar!
¡Ay! corazón,
no te vuelvo a ilusionar
... si al final
siempre es la soledad
la que ocupa nuestro tiempo
y eres tú, quien termina
enloqueciendo.
Perdón te pido, corazón,
¡No te vuelvo a enamorar!,
No sufro más por ese sentimiento.
De que vale sufrir, si al final
a ella no la tengo.
¡Ay!, corazón,
¡Jamás te vuelvo a enamorar!.