Un manojo de palabras, como recuerdos... para tu noche.
Con el permiso de tu ángel guardián, quiero romper el silencio de tu sueño,
y derramar violetas en tu almohada... para caminar juntos esta noche sin caminos
por un sendero de infinitos.
Así, quiero unirme a tí. Perdido en el deseo para encontarte en cada beso.
Sin pasos que me alejen, sin soles que me separen, y un recodo de esquina
que regale sombras para el abrazo furtivo, fuerte, tibio, juvenil, inocente,
con miedo, pero triunfal.
Así, juntos, te quiero.
Cadenas de espumas, o anillos de luz, uniendonos aquí o en el futuro.
No importa dónde ni cuando. yo sé que iremos juntos al encuentro de cantos
perdidos y de coros vírgenes que nos esperan.
Oh, deja de lado esas postales enmohesidas por el fracaso
y sólo trae como equipaje la fe en el porvenir,
porque esta noche... no te dejaré ir.
Te tengo sumergida en mis venas.
Te aprisiono en el cielo abierto de mi cariño sin fin.
amarro tu aliento entre los latidos de mi corazón.
Puedo recortar tu figura con los dedos de mi alma,
y tenerte prendida en el ojal de m pecho, como una flor.
Esta noche, te quedarás aquí.
O, nos iremos juntos... montados en un corcel de recuerdos...
Recuerdos, para tu noche.