Y si la hipocresía me rodea, huyo
Y si el rencor me envuelve, sonrío
Y si el odio me atrapa, lucho
Y si el desamor me llega, muero
Y si sigo yo, la vida no sigue
Y si la vida sigue, mi «YO» (tan fútil como la palabra misma) no avanza
Y si derramo sangre, mis venas sonríen
Y si mis venas sonríen, la muerte, tan sedienta y ansiosa; me muestra sus brazos