Ya no te quiero
Ya no te quiero.
Fueron momentos difíciles,
de estrujar lo que sentí,
de convertir mis aspiraciones en estaciones del hastío,
de esperar sentado en una banca llena de horas perdidas,
de creerme eso que se llama: Pronto,
de quedarme como un tonto,
contando los besos que te iba a dar...
Ya no te quiero.
Pero en las páginas escondidas aún cuento de ti y de mí,
de una promesa que se fue de vacaciones,
de un arduo trabajo que terminó con tu renuncia,
con tu ausencia como marco de tantas horas de esperarte,
de un personaje confundido,
de tanto amor de darte.
Yo no te quiero.
Aunque no sé si te he olvidado,
hace tiempo te abrí las puertas de mis entrañas
y no te he visto salir...
Porque es difícil olvidar lo que fue herida,
aunque te crea cicatriz,
porque es difícil arrancar tantos años que se empeñaron en reconocerte,
como motivo imprescindible en el sentimiento que aún extraño...
Ya no te quiero, pero
¿Debería quererte?
Acaso me he preguntado ¿Por qué aún no llegaste?
Acaso yo soy el dueño del tiempo por donde pasaste,
acaso besar tu cuello ¿No merece esperarte en silencio?
Ya no te quiero...Es cierto.
Y es que ahora ¡Cuánto te amo!
Porque mi espera, ya no me desespera,
porque sé que mi capítulo terminará en un abrazo, aunque no sé cuándo,
porque el amor y el universo tienen una misma medida
y porque una promesa, ha retornado de sus vacaciones en las playas de un no sé qué.
Ricardo Felipe
El último bardo