Siempre habrá quien nos mire con recelo
Sin tener ni siquiera la osadía
De indagar si es de noche o es de día
Para aquel que pretende alzar el vuelo
Siempre habrá quien critique sin medida
Sea bueno o sea malo lo que hacemos
Si lo malo perdidos parecemos
Si lo bueno fue suerte aparecida
Bienvenida la crítica inclemente
Es crisol que depura nuestras almas
Al compás de los pitos o las palmas
Hombre recio quien sigue solamente
La voz de su conciencia así probada
Por la crítica acerba desalmada