Eres algo así como un poema celular,
escrito en el idioma de los dioses
y cada vez que te leo y te logro recitar,
descubro, entre líneas, mil formas
nuevas de entender el universo…
Eres un enigma, cifrado
en el más bello lenguaje conocido
y cuando te traduzco y te logro descifrar,
descubro los secretos milenarios
de las leyes y las formas del amor…
Eres la fórmula divina,
descrita en elegantes ecuaciones
y cuando te comprendo y te logro resolver
descubro en tus variables y constantes,
la unificación de todo cuanto existe y ha existido…
Eres la mujer que busqué toda mi vida,
eres la belleza misma, sin vanidades ni egoísmos,
eres la mejor sonrisa con que la vida me saluda,
eres la alegría que refresca el mundo donde habito,
eres el nombre sagrado de mi última morada,
la palabra final que calle mi voz en un beso infinito,
la horma del último abrazo que sostenga mi cariño,
el paisaje que quiero llevar tatuado en mi mirada,
el punto final de esta historia breve que llamamos vida,
eres donde todo acaba y donde todo vuelve a comenzar…