Miguel Angel Altuve

Maldita soledad.

Maldita soledad

 

La de levantarme de madrugada, 

Voltear y no verte.

 

Inseguro de que estabas,

Vuelvo a mirar y solo consigo esta ventana,

Coloco la clave, como si tuviera cerrojo,

Abro y echo un ojo,

y solo por casualidad recuerdo

Que en esa playa de tu imagen sólo estamos los dos,

No puedo entrar en este espacio,

La ventana solo me deja divisarte,

Tu allí tomando sol,

No es piscina, es la playa,

No es cemento, es arena,

Eres tú tendida allí,

Tendida como una Sirena.

 

La cobertura es el aliento de la voz de estas ventanas,

Y a muchos nos pasa que queremos huir por ellas.

Contigo,

O hasta ti.

 

Y rendirme allí ante ti,

Y sin mentir o desear haber hecho,

Demostrar con hechos que soy real,

Llegar a pensar así no ha sido cuestión de suerte,

O azar,

Pensar así es tal cual,

La suerte del Oso o del León,

Que aún teniendo hambre en el zoo,

Con miles de presas en frente,

Solo pudiendo saltar, devorar y meter el diente,

Por los momentos espera su oportunidad para cenar.

 

La mejor presa, al verse acechada, no opone resistencia.

 

Y volverte a devorar será un placer.

 

Vuelvo a mirar por la ventana y sigues allí, tomando sol.

Con todo un mundo por delante,

y yo, queriendo estar allí.

 

ma2c.