Su boca de lengua reptil
sus prestidigitadores dedos
el fuego de su piel
y esa mirada electrizante
en desquiciado aquelarre
poseen mi cuerpo
y mi sangre amenaza
un tsunami imparable
en venas y arterias
Cierro los ojos y mis sentidos
todos en conjunto y cada uno en particular
se agudizan tanto que hasta el brillo lunar
me enceguece si atino a abrirlos
Me entrego a su fiesta de emociones
y el mundo desaparece y el dolor no existe
solo él y yo conformamos
el único universo posible
Angela Grigera Moreno
Derecho Reservado