Mujer, me quito el sombrero
para ponerlo a tus pies,
en su homenaje o, tal vez
mejor, a tu cuerpo entero,
porque bien que lo merece,
porque hay que ver cómo luce,
porque hasta Venus desluce,
que ni divina parece,
si contigo se compara,
y no es porque manca sea,
más que a Venus te desea
el que ojos tiene en la cara,
pues, en la naturaleza,
en todo el orbe terrestre,
no habrá una rosa silvestre
que te aventaje en belleza.
© Xabier Abando, 11/08/2020 🌹