Cojo una silla y me siento al lado de la ventana, veo pasar volando un Ángel, me mira,sonríe, me saluda y sigue su vuelo, parece que tiene prisa, antes solía ver pájaros volando,últimamente veo cada vez más Ángeles y Diablos
Hoy tengo el Alma rara, solitaria, muda y sorda, hoy hablo y pienso para dentro, mi aliento choca continuamente contra los cristales y los empaña, así no hay forma de ver lo que ocurre ahí fuera
Abro la ventana estoy en un sexto piso, miro para abajo y me imagino tirándome al vacío, cuento hasta seis calculando lo que tardaría mi cuerpo en tocar suelo, se me ocurre pensar si dolería quedándome inválido, o moriría al instante, pues tirarte por la ventana y no morir sería una putada.
Alternativamente lloro y rio, miro la Luna y me pregunto el porque de una roca redonda y plateada colgada de alguna cuerda siempre me habla, al mismo tiempo pienso quién fue el pintor que pintó el cielo, y lo dejó con esas luces pequeñitas que le llaman estrellas y qué
abarcan toda una cúpula en medio de la nada.
Cuánto misterio hay por explorar y sigo preguntándome ahora que ya es madrugada
¿ Porque la seda es blanca? ,
¿ Porque la escarcha es fría ?
¿ Porque la rosa es fresca ?
¿ Porque tu pelo está hecho
de fino oro y la ninfa ríe bebiendo mi vino ?
Y siguen mis dudas y las plasmó en medio
de mi Locura.
¿ Porque la libertad está siempre encadenada ?
¿ Porque el llanto es un canto que desgarra ?
¿ Porque esa golondrina se ha parado frente a mi
me besa con su mirada ?
Cierro la ventana, si algo estoy casi seguro es que
la vida sigue ahí afuera, las respuestas a todas mis
dudas otra vez dentro de mi se quedan, me echo a
la cama y le digo bajito a mi almohada, que rara esta
hoy mi Alma.
Mael Lorens
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de Autor 29/07/2019