Edel Vicente González Pérez

Entre el café y tus labios

Entre el café y tus labios,

tan sólo un paso,

Entre tus labios

y mi corazón un instante.

 

Entre tus manos

y las mías la suave caricia,

Entre mis ojos

y los tuyos la mirada cómplice.

 

Había ganas reprimidas

e ilusiones deseadas

de fusionarme entre

tus brazos, sentirte mía.

 

Y cada momento,

cada palabra,

en esa calle sin salida

beso a beso taponada,

una luz se encendía,

la complicidad alumbraba.

 

¡Qué dulce son los besos

cuando te salen del alma!

¡Qué dulce tu boca,

suave húmeda y con ganas!

¡Qué poquitos han sido

cuando quiero tener tantos!

¡Qué me arrebaten los sentidos

y qué me roben la calma!