Con el cándido beso de los lirios
y el dulce color de la primavera,
vuelve a clavar tu verde mirada
en el piélago de la mar serena.
Como aroma carmesí de las rosas
y palpitante néctar de las flores,
derrama en los efímeros vientos
la suave fragancia de tus amores.
En la rosácea aura matutina
mi corazón libará tus efluvios,
como la abeja el polen de las flores
en las frescas mañanas de junio.
Y mi sed de amor quedará saciada
cuando beba el licor de tus corales,
como la delicada mariposa
cuando liba el rocío en los rosales.
Aromas de nostalgia