La inspiración no se inventa,
Te empuja, te atormenta,
Se hamaca entre las lianas
Como Tarzán, como Juana,
Como monos de la selva
Que caen sin que los veas
Arriba de tu cabeza,
Como cocodrilos malos
Que acosan sin que los sientas
Deslizándose en pantanos
Y te muerden sin piedad
Cuando menos los presientas,
Manteniéndote despierta
A las 2 de la mañana
Aunque no tengas más ganas
De escribir tanta pavada.
La inspiración te acurruca,
Te da fuerzas, te da lástima,
Te encuentra hecha un fracaso
O te consuela en el alma.
La inspiración es de hielo,
De arcoíris, de esperanza,
Es de pensar en la vida,
En la muerte, en la fragancia
De cosas que nunca pasan
O las que casi te arrasan.
La inspiración no se busca,
Se encuentra bajo la almohada,
En alegrías comunes
De pedazos de nostalgia.
La inspiración no se inventa,
Ella te encuentra, te atrapa,
Te llena toda la vida
Día y noche, noche y día,
Como un fuego que no acaba.