Antonio Leyva

Se me acabó

Se me terminó el vino

Y abrí otra de tequila

Es la vida de un cretino

Cuando necesita pila

 

Fue un maestro tequilero

El que me enseñó el sendero

Fui destilando magueyes

Durmiendo cual pordiosero

 

Esperando la propina

Por estas letras tan falsas

Que sólo buscan la rima

Brincando en fuego descalzas

 

Te cambio alcohol por un verso

Un vino por un consejo

Soy una estafa, un pendejo

Otro poeta sin esfuerzo,

 

Y escribo sin revisar

Acato sin rechistar

Porque mi voluntad no existe

Solo me quiero emborrachar

 

Y me prometen 6 cervezas

2 botellas, 20 cigarros

Todo en cambio de mi alma,

No los quiero,

Tómalos

 

Espero que lo disfrutes

Mientras que yo me desgasto

Es vicio, no doy abasto

Y en mi alma es que repercute

 

Pero más fuerte en mi salud,

A mí, qué me importa el alma?

Si ya no hay tierra que cuidar

Ni vida pa contemplarla