Tormenta
Fugaz nace, el galope del cielo
Botando desde arriba, de a pedazos el firmamento
Saco mi hoja y mi tinta veloz
Para describir cada gota,
Pero se esconden, y mi pluma no las alcanza
Pues, vuelan tenaces de mi nube, el verso.
Tirita asustada la casa lóbrega
Ante el temor de un surco en el techo,
El ímpetu de esta agua con pasión de fuego
Que funda nuevos ríos,
Y ahoga viejas calles.
Tu amante, la tierra;
Que ahogas en pasión con tus gotas
Como ósculo del ángel.
El frondoso gris de tu hastío
Es el Libar del deseo de una muerte
Que trae consigo la humedad de un suspiro.
Aullido de tu cielo
El nublar socavado de tu vehemencia
Que vuelve al día en noche
Alejando al sol por no tolerar
Tus besos con la tierra.
Como próceres de una fiesta caen tus gotas…
Nada de elegantes;
Pues corren y se amontonan en
La puerta de una nube para salir todas juntas
Tal como las palabras en mi verso.-
Tu aguacero, hace llamas,
Provoca pasiones a enamorados,
Se derriten en los labios
Con un sabor a tinta
de seducidas figuras.
Te calmas, te escribo una carta:
Te amo, humedad del sosiego
Que bañas mi alma con tus gotas de amores.
Sus ojos embelesados observan
Tus zapatos de ilusiones
Y su ventana empañada mira recordando
El rodar de la nostalgia por su cerro de complacencia.
© Carlos Bastías Cid. Todos los derechos reservados.