NOSTALGIA
La nostalgia se disparó a millón con las nuevas canciones de Yordano, fui a dar a los 80 con solo cerrar los ojos, y ahí estaba, en sabana grande, viernes, con mis pantalones de campana, franela negra, zapatos de goma; en un bolso algunos libros y una botella de cava o de ron, sino de anís; en el aire se respiraba la sensualidad del presente, que importa el futuro, sus consecuencias, hoy es el último día sobre la tierra; antes debo pasar por la escuela de letras a saludar a Hanni Ossott y asistir a la última clase de “literatura y vida “ bajo la batuta de Rafael Cadenas; para luego, lo más importante, buscar a mi pana Jesús Eduardo, ya que en su Volkswagen rodaremos por la ciudad a ver dónde nos coleamos, siempre hay un brindis , algún un agasajo , seguro una reunión ; donde el licor , el sexo y la poesía, nos esperan. El humo de lo que no hemos fumado durante la semana, colapsará en los pulmones, fumigará el carro y saldrá por las ventanas como en una chimenea. Nos sentiremos los salvajes y alegres dueños de la noche, no seremos responsables de lo que hagamos, y si algo pasa, peligroso o glorioso, porque alguna carajita se enamoró de algún verso, cada cual por su lado.
De pronto, alguien me está zarandeando, abro los ojos y es mi nieta de tres años pidiéndome un poquito de agua.