Gracias,... Muchas gracias
A ese benefactor tan grande que me concede algo más que la existencia, la vida.
A esos seres humanos que hoy puedo llamar mi familia, sin importar si llevan mi sangre, apellido o me encontraron en el camino.
A la vida misma, que entre tantos sabores y sinsabores hoy me da el placer de disfrutarla.
A todo aquello que viene a mí, sin importar si me hará llorar o reír. O sí me deja o me quita... Pues siempre recibo cosas que más allá del merecer me hacen crecer.
A los que ven de lejos... Porque en algún momento estuvieron en primera fila dando sus mejores palabras de aliento.
A los que ya no están, por toda la sabiduría que me heredaron. Por las enseñanzas y las anécdotas que hoy forman parte de mí.
Y así he de seguir... agradeciendo, porque tengo más de lo que merezco. Y aunque sea poco es indispensable.
-Joss-