Era la noche
Era la noche que regalaba flores mi jardín
en su cumpleaños dieciséis,
volaban seis orgullosos pájaros sueltos todos a granel,
fueron sueños alzados ante el destello de la madrugada
y mientras caminaba solitaria,
luces de bengala en sus oídos
llegaban en forma de contrabando,
robando lo que crei nunca fuera perdido.
En un banco sentada vio a una doncella
a su amor entregada
pareciera lo estaban disfrutando,
al cruzar por delante de ellos,
la cabeza pude bajar,
un silencio atravezó su semblante como fuerte puñal,
descubrió la silueta del amante que alli pudo divisar
y ella feliz sonreía, no queriéndola escuchar.
Mordió sus labios, sin dar una simple querella.
Era la noche que su jadín le regaló una violeta
anunciando fiesta de su cumpleaños dieciséis,
no hubo la llegada,
menos el ramo que esperó.
Apagó la llama entre besos que recién comenzó.
Caminó la esperanza detrás de sus anhelos,
vio que había en el banco tirado,
un pañuelo por la vía láctea manchado,
como lo hizo con ella.
Desde el cielo un guiño le llegó,
el lucero con luz tardía,
sus brazos con amor le abrió.
NC-21-8-2020