El silencio me trajo tu recuerdo
y no lo pude soportar,
me taladraba el alma
saber que no me llegaste a amar.
La oscuridad me trajo tus besos,
los sentí uno a uno por mi piel,
me quemaban por dentro
al saber que yo no era tu querer.
La madrugada me trajo tus caricias,
quisé atraparte por siempre en mí,
pero habías dicho que tú eres libre
y no quieres nunca sufrir.
Y todo lo que te amó mi corazón...
y todo lo que yo te daba...
¿qué haré ahora con este dolor?
es algo que me quiebra el alma.
Y no quisiste nunca volar junto a mí,
nunca dijiste que me amaras,
a tí solo te gusta viajar
a donde te lleven las ganas.
Jamás me necesitaste,
jamás yo te importé...
¿qué puedo hacer ahora
que se derrumba mi ser?
A seguir viviendo por ahí,
a seguir volando sin fin,
como una paloma herida
seguro moriré sin ti.
YOLANDA BARRY.