Hoy recordé que no se escribir y que la inspiración era prestada.
El deseo corría presuroso buscando un espejo, acceso a la pasión.
¡Oh, tu boca descarada! , pescado seco y sal
Embrujo marino que estalla en mi garganta
Amor de un día, réplica de amor en muchos amaneceres.
¿A dónde vas cuando no eres mío?
Me escoce el pensamiento si no te tengo.
Veo ir a las palabras en un carrusel y regresan cacofónicas.
¡Oh, alentador del universo!; ¿ Por qué me buscas si sabes que te encuentro en cada calle?
¡Oh,tu labio superior!, Anguloso cómo la muerte.
¡Oh, labio inferior!, redondo como manzana en el paraíso.
No te quejes si no escribo, sólo puedo escribir de ti.