DENTRO DE TI LA LUNA DEL MAR
A pesar de todo, el hombre tiene tanto apego a lo que existe, que prefiere finalmente soportar su imperfección y el dolor que causa su fealdad, antes que aniquilar la fantasmagoría con un acto de propia voluntad’.
“El túnel”
—Ernesto Sábato
Con el corazón, escribo un poema sobresaliente,
pronostico años de concurrencia desde la embocadura
que promueve un cruce de caminos
que se anude al arte,
un poema de envergadura total que reabra las alas,
y hacer cercadas con la noche que hila nubes a las estrellas,
pero estoy cansado de haber perdido tantas veces,
y cuando miro en el vergel que espera la luz,
no soy un pez del mar, en ocasiones me falta el agua,
busco en la tinta tu nombre, y desapareces,
pero tienes cara de ángel, en tus ojos veo algo especial,
enciendes la piel del animal que me soporta,
y no me asusta,
ni me daría miedo abrazarte en un telar de plumas,
voy a desenmascararme con tesón,
tengo que poner mi pulso a disposición de la vida,
existir, saber quién soy,
hacer las cosas tal como se saben,
hasta ahora no me encuentro en mi ser claramente,
Armstrong pisó la luna el año que nací,
y por deducción,
respiré de la magia astral de aquel vuelo aéreo.
Tócame, si tienes preguntas, llámame por mi nombre,
la dulzura del sueño abre las puertas cerradas,
no quiero callarme más lo que siento, óyeme,
estoy gritando desde una tierra lejana,
tal vez la mañana dure eternamente, tal vez no,
y hoy dejé mi corazón templado en los jardines,
pero cuando acudas a cortar flores, piensa en mí,
los pétalos de las rosas te pertenecen,
tu mano será mi guía cuando salga a caminar,
existamos como existirás en este poema sobresaliente,
habla de ti, hila coordenadas, ata cabos,
quiero saber qué siente la luna del mar dentro de tu vientre.