Anaris

ALMA DESNUDA

Cae la tarde bajo un velo anaranjado,
me inundo de cristalinos párrafos,
versos musicales, métricas y ritmos,
amor, desamor, humanidad, salmos.

Fantasía aspirando el mejor verso,
palabras consonantes abriéndose paso,
letras que brotan del alma como ríos,
sílabas huérfanas, buscando paralelismo.

Todo es poesía en el atisbo de la vida,
versos suntuosos, arañando un resquicio.
Pero… ¿Y si retiro del poema,
¿los versos, las rimas y los vestigios?


Solo quedaría el alma desnuda,

los versos despojados de canto.
Y bajo el velo anaranjado solo se oiría,
te extraño, te sufro, te vivo, te amo.

 

Ana Barroso Molina