Casi inseparables fueron
los amigos por mucho
tiempo hasta que una
de su pareja intervino,
no le gustaba que se
vieran tan seguido,
temor a que lo llevara
por el mal camino,
que le fuera infiel,
o tal vez que le confiara
conversaciones que jamás
tendría con ella...
Un buen día planeó una
salida y fueron tantas
las incomodidades que
generó que sus salidas
cada vez se hicieron más
esporádicas, una excusa
trajo a la otra y otra
tras otra hasta que por
fin logró su objetivo.
Sin ningún remordimiento
le preguntó por su amigo
y este le dijo que en realidad
se había dado cuenta
que eran más los inconvenientes
que le traía su amistad....
Ella había sido su única
confidente y nunca entendió
el sentido de la amistad,
pudo más su egoísmo, inseguridad,
y poca confianza para poder
compartir esa gran enseñanza
que siempre tiene una amistad...