Se escuchan albos cantares
dulcemente melodiosos
de canarios y jilgueros
con algunos abejorros,
es un curioso concierto
regalo especial del cosmos.
Gorjeos llenos de gracia
que salen de verdes sotos
de la orillas del riachuelo
donde habitan pulcros gnomos
que cuidan de su jardín
danzando con ritmo ignoto
y tienen en los colores
su más preciado tesoro.
Es un ambiente perfecto
de armonía como pocos
no existe la mezquindad
ni comportamientos toscos
aparecen los senderos
bordados con sauces y olmos
que protegen la cascada
monumento del entorno.
Es el ambiente del bosque
donde un niño bullicioso
va caminando entre flores
buscando los frutos rojos
que los duendes, sus amigos
le han brindado presurosos,
tienen espíritus puros
por eso no existe asombro.
El corazón de los niños
es más brillante que el oro
siempre defiende a natura
y de la mano de gnomos
van desarrollando historias
de las cuales son devotos.