¡ Mea culpa ! Y reincido lo admito, es duro pero es parte también de la vida real darle lo que es propio a los hechos, reincido en un tema que más que eso es un dolor tan profundo que me y nos ahoga como país.
Mi Colombia se baña a diario de la sangre joven que pide a gritos poder cambiarla, gente inteligente y trabajadora que es una joya para este país se está dejando sembrada en la tierra de unas formas tan crueles que no son admisibles a un ser humano normal, es tanto el dolor que no se quita, son días y días en que no podemos descansar en la noche y en el día esperando la próxima masacre cruel y absurda.
El encierro cómplice ha causado un sentimiento de pena que al sol de hoy con diez días de llevar sumando muertos en una cantidad absurda que no tiene freno posible nos deja como muertos en vida a los que somos espectadores de esto, algo que tiene su propio adjetivo cruel y asqueroso pero es cubierto además de palabras tontas por un gobierno que sólo habla tonterías y que no da al hecho la verdadera importancia que tiene.
Evasión ....posiblemente es eso, ignorancia...No...Así con mayúscula, un posible olvido....Si, de todos los que lo defienden porque se deja ver en la tele hablando de una cantidad de muertos por pandemia celebrando su « buena labor » pero que sólo cubre con su manto de hipocresía la pura y dura verdad.
Es como si mi país no estuviera en la geografía del planeta y vivieramos en un lar ajeno sin más a nuestro alrededor, solos y en una cárcel de odio, de rabia contenida por años de ver una violencia por parte de todos los que al pueblo matan.
Guerrilla, paramilitares, estado, grupos extranjeros, mafiosos, delincuencia común y ¡ Valla Dios quienes más !! nos dejan un sabor de boca a impotencia y rabia también que nos está acabando poco a poco .
Un país sin oportunidades para tantos por causas de la pandemia, una economía muerta que no se ocupa de los más pobres porque hay cosas más importantes como ayudar con grandes capitales a los más millonarios dueños de esta tierra rica, pero pobre en sentimiento por el otro, el que padece hambre, frío, pobreza que ya venía de antes y que es nula con lo que hoy aqueja, la mala educación que pulula ante un sistema que quiere una juventud tonta pegada de un móvil para adormecer los sentidos y las voluntades, la forma más aberrante de educar por miedo de la frialdad de un computador por órdenes más altas.
No sé hasta cuándo soportaremos este embate de violencia absurda que mata la juventud destrozando sus cuerpos sanos aún para demostrar el gran poder que se tiene pero que sólo acaba con el mañana.
La usual corrupción que tapa todo con un manto de injusticia y de negligencia ante todo esto y que de deja ver con cara de presidente que no preside nada porque hay una mano más poderosa y cruel detrás de su espalda y que moviliza su conciencia ya negra y sucia.
Somos culpables de esto tal vez los colombianos por elegir siempre al que no era o tal vez sólo seguimos siendo « la patria boba » de ayer pero con más muertos y más criminales decidiendo por nuestras vidas.
¡ Hasta que amemos la vida !
Nombre del nuevo colectivo social, artístico y humano en Colombia por hacer visible la verdad de este mal ante el mismo país y ante la posibilidad de que los estamentos mundiales nos noten ese SOS que decimos a gritos ¡ Por favor ayuda !
Dolores Luna.
Agosto 31. 2020.
¡ Duele mi país, cómo duele !