Casi medio siglo pronunciando tu nombre
en el secreto de las noches de insomnio
buscando cruzarte en las calles del pueblo
fingiendo la casualidad del encuentro.
Casi medio siglo amando en silencio
repasando diariamente pequeños recuerdos
para que no se me olvide tu risa primera
tu beso, tu pelo, tu piel, tu caricia.
Casi medio siglo desafiando el tiempo
para que siempre me veas bella
aparentando que el reloj del cuerpo se detuvo
la tarde joven cuando dije te quiero
Casi medio siglo que el el hilo rojo
amarró nuestro trágico destino
sacrificios nuestros y prejuicios ajenos
llevaron nuestros corazones lejos
Hoy, con los pies cansados,
con el cuerpo caído,
con mi pelo blanco,
te amo como ayer,
te busco en los sueños,
te nombro en los silencios
con el corazón siempre nuevo
eternamente enamorado
esperando que el universo se equivoque,
y liberados,
un día cualquiera,
si aún estamos vivos,
llames a mi puerta