En mi sueño de niño,
las estrellas alquilaban condominio.
Me peleaban más cariño,
o mi cielo dejaban vacío.
Mis ojitos se llovían
mis manitas se acurrucaban.
Los piececitos se cruzaban,
¡Temía que me cortaran!
Un día,
con veloz sigilo,
cuando la estrelliza dormía,
amarré a todas con un hilo.