Karerina Liz

REENCUENTRO

Tus manos tomaron las mías,

aquella tarde tu presencia enloqueció mi corazón,

mientras nuestras miradas jugueteaban

y mi sonrisa brillaba con solo mirarte.

 

Nuestras vidas se re encontraron; 

las dudas desaparecieron,

tu llegada tranquilizo mi ser,

llenó de nuevo mis esperanzas y sueños;

y mi amor florecía nuevamente cual flores de campo.