jorge enrique mantilla

El seminario del diablo

El seminario del diablo

 

Una nube densa y oscura, cubría de sombras al caserío

Recorrer aquellos pasillos desolados, producía escalofríos

El panorama alrededor era un reto y un atenuante desafío

Recorrer aquella ruta del misterio, de pánicos y hastío

 

En El Cerrito, Santander y Servitá su bello corregimiento

Se alzan las ruinas de una maravilla, llena de lágrimas y sentimiento

El seminario del diablo, de leyendas y mitos de sufrimiento

De tierras hermosas y de gentes campesinas, humildes de nacimiento

 

De un palo de mortiño, alguien talló al mismísimo lucifer

Porque al diablo en persona, algún día quería conocer

Tallado en madera, alto y delgado, sus caprichos satisfacer

Satanás se le presentó a aquel hombre y su cuerpo empezó a fallecer

Y abandonada aquella estatua, al seminario alguien quiso esconder

 

Recogida como un tesoro, al seminario de Servitá la llevaron los seminaristas

La gente lloraba y gritaba, que al pueblo se lo habían tomado los comunistas

Y el ángel maligno de lucifer, era el amo y el protagonista

De miedos y espantos, de curas y estudiantes bromistas

 

Los tiempos pasaron y los seminaristas huyeron despavoridos

Dejando al seminario abandonado, de escombros, de pavores y pánicos permanecidos

Edificación colonial española, de tapia pisada y pisos de ladrillo cocido

Pasillos y zaguanes donde habita lucifer, con el diablo dormido

 

Las ruinas del seminario producen tristezas, melancolías y soledades

Terror y estupor, al traspasar los aposentos en las oscuridades

El chirrido de escaleras y el paso lento de los engendros, adefesios de las curiosidades

Voces de ultratumba, que salen de los sótanos del interior de sus profundidades

Rezos y agua bendita, riegan en sus alrededores, sin seminaristas, las comunidades

 

Seminario del diablo, convertido en ruinas de humedad y de excrementos

De suspenso y de soledades, de fantasmas, de leyendas del ayer y sus acontecimientos

De ambiente denso y lúgubre, tenebroso de alaridos de las entrañas de su convento

Joya arquitectónica abandonada del seminario español, que una vez estuvo llena de conocimientos

Paredes que guardan secretos de lucifer, de espantos, de sombras, demonios

De lágrimas y llantos de sus lamentos

 

“Joreman” Jorge Enrique Mantilla – Bucaramanga agosto 24-2020