Los años te brindan lúcida confianza
a distinguir lo auténtico da la apariencia.
En éste ateísmo mi espíritu alcansa
el período paroxismo de la existencia.
Entonces;para qué,ésta lúcidez.
Si tengo la carne con miedo de paso
y la frente arriscada de timidez
cubren las sombras que traspaso.
El sol,la luna, la rosa y el amor.
Sempiterna memora,espejo del pasado.
Y el consuelo de perder,lo que no se tiene.
Esa sombra que traspaso con pavor.
¿Será la víspera,de otro espacio encantado?
Sobre esta perecedera base;el alma se sostiene.
Julio Carbó