Quisiera decirte que eres todo,
que sin tu compañía la vida es vana,
que no importa lo que suceda estoy contigo y para ti en cualquier momento de nuestra vidas,
quisiera decirte que el mundo ahora es diferente,
es que ya no estás,
ya no te tengo si es que alguna vez te tuve,
que desde que te fuiste la vida es distinta;
ahora el mundo brilla de manera diferente que cuando estabas tú,
es como un brillo efímero mientras tú eras sol,
mientras tú llegabas e iluminabas todo con solo parpadear,
ahora la vida no tiene el mismo sentido
y no es que dependa de ti porque no lo hago,
pero si me acostumbré a quererte y no como quiere cualquiera,
me acostumbré a tus risas sin sentido y a veces fingidas,
me acostumbré a tus caricias de la nada,
a tu insensatez a tus malditos defectos.
Y aunque me repita mil veces que no te quiero,
que te he logrado olvidar
tú eres de esos pocos amores
que se te clavan en el alma,
en la mente y hasta en la yugular.
Te juro que he tratado de olvidarte,
pero los recuerdos,
los momentos que me prestaste de tu vida
me hicieron el ser más feliz del mundo
y quisiera aferrarme a la idea de verte sin sentir que te quiero,
de olvidarte sin tener que recurrir al incesante odio
que me ha hecho tanto daño.
Soy consciente que ya tienes una vida y yo también
pero una vida que no tiene el mismo vibrar que me hacías correr por las venas,
ésta amado mío es la última vez que te escribo,
así sin que te des cuenta
y así sin que yo me dé cuenta lograré olvidarte
y sacarte de mis entrañas para no hacerme daño
con un querer que no puede ser y con el que yo no me deja ser.
Quisiera decirte eso y mucho más...
pero soy muy cobarde.