A mi sobrina Valeria
¡Feliz 22 cumpleaños!
Y llegaste a nuestro mundo
desbordando de alegría
nuestro pan de cada día
que sentíamos fecundo.
Tu llanto fue un sí rotundo
que la vida transformó
y nuestro mundo giró
en torno aquel nuevo ser,
entregando este querer
a la niña que nació.
Con la luz de Sol llegaba
una niña que ilumina
la sonrisa de Yanina...
es la hija que ella esperaba.
Siempre Yanina soñaba
con ser una buena madre.
Su hija no tuvo un buen padre,
el tiempo en su sitio pone
esa paz que predispone
a que nuestro mundo encuadre.
Pasados veintidós años,
Valeria hecha una mujer
demuestra con su crecer
que ha vencido muchos daños.
Atrás quedan los araños
que en tu piel marcas dejaron
y esa ansiedad que crearon
mil noches de pesadillas.
Ya no andarás de puntillas,
tus fantasmas se esfumaron.
Ahora a vivir la vida,
tu tiempo recién empieza
despejada tu cabeza
siéntete hija muy querida.
De gris y blanco vestida
afrontas otro futuro
desde España yo te auguro
en ti habrá felicidad,
y sonreirás de verdad
esa dicha te aventuro.
Un beso y una flor
Francisco Javier Ramos
14 - 09 - 2020