Nacho Rey

CLEOPATRA

 

Reina de dioses ya sin nada,

tu tristeza de mármol correspondida,

tenías la pasión del cielo querida,

y, sin embargo, tu voz quedó callada.

 

Roma insatisfecha, te dejó sola,

ordena los amores tu supervivencia,

que muere la patria en urgencia

y tú, la última que Roma viola.

 

Esplendores de una faraona silenciosa,

póstumas llamas de voces celestiales,

llega ya sus momentos fatales.

 

Ya con suma sencillez, llega el final

de la faraona de Egipto, que nada accidental

dió muerte, la vil serpiente venenosa.

 

                                             NACHO REY