NOCHE NO TE VAYAS.
Noche no te vayas,
quédate en mi alma,
que amanezca no quiero,
porque en tu imperio la sueño.
Noche no te marches ruego,
que durante el día yo muero,
porque despierto no vivo,
solo en mi sueño está conmigo.
Quédate perpetuamente,
que en tu silencio y sombra,
oigo cuando me nombra,
muy dentro de mi mente.
Y en el claroscuro del develo,
en el que se suele soñar,
parece tan accesible el cielo,
que hasta lo sentimos tocar.
¡Oh amargo desconsuelo!
Volver a la impía realidad;
Habiendo pretendido volar,
no hemos salido del suelo.
Por eso noche no te vayas,
quédate por siempre más,
déjame al menos soñar
y en su amor fantasear…
Aunque no la tenga jamás.
Noche quédate en mí plena
y cobije tu crespón mi pena,
como el recuerdo que queda,
opuesto al olvido cuando llega.
Cobíjame en tu oscuridad,
íntima, apacible y serena,
pues amo ya tu tez morena,
sobre un mar sin libertad.
Autor: Víctor A. Arana.
(VÍCTOR SANTA ROSA)
Septiembre 18 del 2020.