Sembró un campo de ternura
en el pequeño hueco de sus manos,
rodaba mimosa
por las yemas de sus dedos.
Cosechó con gozo
un corazón endulzado
guardián de la verdad
refrescando a gotas como el rocío.
Acompasó el ritmo de la tierra
sintiendo el murmullo de la brisa
amó la vida y sus secretos
en su sudor resbalaba la sinfonía del amor.
20/09/2020