En el trato con la gente
Reconoces tu grandeza
O, a la mejor, la pereza
Que te hace un inconsciente;
Si te alteras, de repente,
Y reaccionas con fiereza,
Trastocarás tu belleza
Con actitud inclemente;
Olvidarás tus valores
Y volverán los instintos,
Los escondidos temores
Que los creías extintos,
Donde los viejos rencores
Se expresarán como gritos…