¡Qué caricias deja el viento!
como la piel de tus manos
mueve las hojas de almendro
mueve suspiros trenzados.
La lisonja de tus ojos
con miradas amorosas
calman todo lo brumoso
calman lo que me acongoja.
El halago de tu pelo
cuando libre sopla el viento
alegra como en los cerros
alegran verdes cafetos.
La terneza de tu cuerpo
envuelto en manto de estrellas
suavemente quita miedos
suavemente en él me quemas.
Las caricias de tus labios
con dulce boca a cerezo
libremente siempre amaron
libremente sin recelos.
La ternura de tus dedos
como el agua fresca y limpia
despertaron muchos sueños
despertaron mis porfías.
La bondad que hay en tus besos
con sabor a miel y fruta
saben como el vino añejo
saben como a la frescura.
La blandura de tu voz
penetrando en mis entrañas
va llegando con tu amor
va llegando muy callada.
Con caricias suaves vivo
en mi espacio susurrando
con caricias nos nutrimos
como dos enamorados.