Esto que brota del alma
al contacto de nuestra piel.
¡Es intensidad!,
por la marejada
de nuestros sentimientos
y se desliza
en olas de emociones.
Es una erupción volcánica
nacida desde el océano
de nuestras entrañas,
nos hace arder
cual llamas encendidas.
Nos sucumbe
en la entrega total,
es un tsunami
de amor involucrado,
que moviliza
nuestros sentidos y energía,
por la felicidad ardiente.
Es un latigazo
que altera nuestro equilibrio…
nos eleva, llevándonos
en un placentero viaje,
al liberar nuestra sensibilidad
con intensidad.
Bendito ímpetu,
que al experimentarlo,
nos deja amarnos con fuerza
y entrelaza nuestra entrega
bajo su lecho,
al fundir con intensidad
nuestro cuerpo.
Magali Aguilar Solorza
(Quiet Night)
Sábado/Noviembre/7/2015 3:22:26 pm
Autora mexicana
Publicado en Blogger y Página Romántica de la Poesía en Facebook poema No 21 y en Revista Poética Azahar No 108