Alegría

Pensamientos de domingo

Una compilación abstracta de todo lo que he tocado, eso es todo lo que soy.

Índigo.

Veo algo lindo y tomo un pincel. Con suma delicadeza acaricio mi piel con su tierna punta, dejando una sombra, un rastro delgado, que termina difuminandose con mi ser.

Bermellón.

Dedos cubiertos de pintura que golpean mi carne. Sin forma, sin rumbo; una mezcla de colores que termina grisácea.

Ámbar.

Con técnica, escoger colores que contrasten para crear patrones nunca antes vistos. Colores que se conecten en su  hálito hasta que parezca que no hay una frontera entre ellos.

Celeste.


No sé quién soy. Miro un espejo. Un espejo con multitudes. Un espejo vacío. ¿Soy yo? Un espejo con colores. Los colores solo me decoran, no soy ninguno de ellos.

Durante toda mi vida he visto los tonos más bellos resaltar en otras personas, así que tomé un poco de ellos y los puse en mí. Soy un popurrí de todo con lo que he convivido, de todo que me ha marcado. Eso es todo lo que ofrezco al mundo

Pero cuando miro al espejo sigo sintiendo que soy una monótona lona blanca.