Esperaré
a que mi mundo sea por siempre destruido
o a que retorne a su tierra la creación
a que se sequen los glaciares y los mares
o que nos cubran y no exista salvación
Esperaré
a que la muerte, con sus penas y pesares
caiga en combate por la espada del mortal
o que su reino en un suspiro nos aleje
de esta mi tierra en que combaten bien y mal
Esperaré
a que mi raza con sus odios se destruya
y en dondequiera fratricidio sea el mal
o a que “armonía, paz y calma” sean los nombres
que el pueblo mío le diera á la libertad
Esperaré
a que no exista un misterio en la ciencia
y no se encuentre otro camino en que avanzar
o a que lo poco del camino que ha avanzado
sea arrojado, en un delirio hacia altamar
Esperaré
a que se encuentre del espacio el finito
o a que deserte en su búsqueda el mortal,
a que se cuente, una a una cada estrella
o a que la ciencia un día lo deje de intentar
Esperaré
a que incontables sean las horas que he vivido
esperaré, y aún tras la muerte, esperaré
esperaré, día y noche yo te lo digo
a que me quieras, yo por siempre esperaré.