A CORAZÓN ABIERTO…
amores invasores.
¡Ay, corazón con puertas de bandera!
Puertas abiertas por donde salía y entraba
lo mismo una princesa que una lavandera.
¡Ay, corazón con puertas de cantina!
Puertas que dejaban pasar por igual
a la más harapienta y a la más catrina.
¡Ay, corazón con puertas sin cerrojo!
cuyo portero habría de par en par
si la que quería entrar guiñaba un ojo.
¡Ay, corazón con puerta sin aldaba!
Para que tuviera franca entrada
cualquiera que dijera que me amaba.
¡Ay, corazón con puerta giratoria!
Por la que entraron y salieron
mil mujeres con más pena que gloria.
¡Ay corazón de enormes dimensiones!
Corazón, asilo de mujeres malqueridas
que obtuvieron de ti, sin condiciones,
el amor que sanaba sus heridas.
¡Hoy, corazón, te he puesto mil candados!
Después de que entró, para jamás salir,
la dueña de todos mis pecados.
©José Luis Morales Villarán.
Diciembre 2 de 2019.