El amor se desvanece entre mis brazos ya muertos.
Te vas de mí, de los latidos de mi corazón, de mis sueños perpetuos
Y al dejarte ir, me pierdo en ti.
Me voy contigo en la eternidad de la luz,
Donde por siempre revive nuestro amor, antes de volver a morir eternamente
Muero cada vez que tus ojos apagan mi voz, porque no vivo en ti,
Bella muerte que me das cuando tus brazos y tus dientes se clavan en mi carne.
Dame la muerte con tu boca suave,
Mata mi cuerpo y ama mi alma inalcanzable,
Retóñame en un beso amanecido y mis labios quedaran tatuados en tus manos.
Muero deseando que tu lejano cuerpo se desnude para mí,
De esas ganas por las cuales te seguí,
Muero por hacerte el amor sobre pétalos rojos de aromas infinitos
Y si mueres amándome, te hace renacer en el amanecer de mi cuerpo.
Clama por mí y de inmediato responderé a tu ruego,
Llegare como chispa de luna a tu lecho,
Tu cuerpo inundaré con mi piel terciopelo.
Te pertenezco, porque solo tus manos están hechas para mí,
Dame tus caricias
Y al final sucumbiremos en este amor que nos hace inmortal