Penetré a mi padre por el oído
penetré a mi madre por el oído
hablé en japones con confundidos zancudos
de cabeza las casas en ladrillos de mármol
enaguas de esperma y pintura fresca en planetas sin temor
barridas salvajes durante partidos de 90 minutos y décimas de segundo
pulgadas de pene y orgasmos extrasensoriales
en sueños profundos
dualidades salvajes que se mezclan con la ansiedad del tiempo
silencio.....mucho silencio
y estallidos en la ciudad