Después de tu partida
Aun mis poros despiden tu esencia
Mis labios aun recuerdan
El recorrido por tu cuerpo desnudo.
Al sudor de nuestros cuerpos
Nombro elixir de fuego
Todo éxtasis, todo pasión
Nuestra completa unión
Fue toda una agonía
Un viaje del cielo al infierno
Tan solo una pequeña muerte en una gran vida.
Nuestra danza bajo sábanas
Nuestros cuerpos al compás
Nuestros ritmos fueron eternos
Fueron música, fueron armonía.
Tus descensos en mi cuerpo son rocío
Son refrescante brisa en alborada
Tus ascensos son las llamas
Que dejan en nuestros cuerpos solo brazas.
Sin pudores, sin temores
Unimos nuestros cuerpos sin descanso
En un clímax morimos constante
Somos el desierto y el orgasmo, oasis.