AYER.
Te amé en otras almas,
te besé en otros cuerpos,
te ansié en otras ansias
y en otros deseos.
Pero siempre fuiste amada
y sin serlo ya eras mía,
porque en toda piel besada,
tu esencia trascendía.
Cuanto te vi en otros ojos,
que me dieron su mirada,
me develaron sus antojos,
con el alma enamorada.
Más tú aún no eras,
pero en mí ya existías
y quizás sin que supieras,
tú también me presentías.
Y creo que me amaste,
al igual que ya te amaba,
en los labios que besaste,
como en los labios que besaba.
Autor: Víctor A. Arana
(VÍCTOR SANTA ROSA)
Agosto 31 del 2019.