Nuestro Amor
Sí, tú, me dejas,
si empecé a enamorarme,
si de repente te ví y si fui como el aroma,
irrumpiendo en un sólo delirio el alma devastada,
si, de pronto, te fuiste y dejaste el delirante frío en mi piel,
desnudando el ocaso en el tiempo, en que desperdicié el instante,
no detengas mis manos que hoy te acarician más el cuerpo penitente,
llegando por el ocaso o con la noche más fría te opones a mí y a mi voluntad,
sólo dejas caer el delirio o el frío en mi piel como gotas de lluvia,
dejando el calor como el abrigo nuestro si sólo es amor,
porque nuestro amor es como el imperio,
si destrozando la luz y el tiempo,
en un sólo y vislumbrante,
instante lleno de amor,
cuando eres tú,
mi amor,
tú...